martes, 28 de junio de 2011

En un pequeño lugar de Ávila se formo una gran confusión.

Si, tu. Tu quien solo comenzaste como una amistad y estas acabando por ser una confusión. Dicen que lo diferente es lo que mas nos atrae, y tal vez es eso lo que pasa. Tu, tu sinceridad, profundidad, tus respuestas medio filosóficas, tu forma de ver las cosas, de ver lo que te rodea; tú.
Porque todo comienza con un verano como otro cualquiera, una petición de amistad un hola ¿que tal?. Continuó con aquello que te preocupaba, aquello por lo que me preocupaba, por esos paseos en los que no conseguía entablar una conversación como es debido porque me costaba no se porque.
Luego vinieron las conversaciones que terminaban en no conversaciones abiertas.
Y ahora, como una tonta me encuentro confusa ante un gran amigo. Alguien al que siempre que veo, a pesar de que sea  poco rato, me voy feliz a casa, con una pequeña sonrisa.
Cada vez que estoy conectada, le busco; consciente o inconscientemente, pero lo hago.
Tal vez no sea la mejor forma de hacer las cosas, tal vez no sea la mejor forma de decir que tal vez te este empezando a ver distinto, que tal haya algo en ti que sea lo que hace que logre sonreir, tal vez tu lo veas estúpido o solo lo veas exagerado por mi parte, pero esto mismo buscaba soltarlo.

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