A día de hoy me he dado cuenta de lo estúpida que he sido durante este tiempo. Siempre me he preguntado, ¿por qué, si eres totalmente diferente? A pasado el tiempo y sigo repitiéndome lo mismo.
Muchas veces me pregunto si esto ha sido un capricho, pero con el tiempo, obtengo una respuesta.
Desde hace un año, me he preocupado día tras día en conocer algo realmente nuevo , un perfil distinto al que día a día percibo. Siempre he intentado, con mas o menos ganas, sacar algo bueno de tus escasas palabras.
Has sido el otro lado de la moneda, cruz o cara, no lo se, pero estabas presente.
Cuando parecia que me importabas, yo no era ni cara ni cruz. Cuando los hechos se confirmaban, tu estabas en una situación bastante mala, pero si, a pesar de todo hay estuve, intentando sacar una sonrisa a pesar de no poder verla; quizás porque apartando confusiones, sentimientos o lo que fuesen, ante todo, eras algo especial, eras mi amigo.
Cuando las palabras eran escasas, he buscado siempre algo que mantuviese esa amistad, que no se perdiera.
Y el tiempo ha pasado. He conseguido lo que nunca había conseguido decir, palabras difíciles de explicar el porqué. Pero ya da igual, ya no existe conversación, ya no se que mas decirte... y eso realmente de lo que mas me arrepiento.
Me alegro de que hayas echo tu vida otra vez, porque te lo mereces mas que nadie probablemente, pero espero que leas esto, te des por aludido y te quedes únicamente con un mensaje:
Puedo afirmar que de cierta forma conociéndote poco a poco, he conocido un poco de mi, he madurado, he visto las cosas de otra forma, que a pesar de que no siempre sea la correcta, he aprendido a rectificar. Puedo decir que he podido conocer a una persona que realmente vale la pena conocer. y para terminar, decir que como siempre, a pesar de que pasen 20 mil años sin saber de ti, siempre que quieras algo, estaré ahi, solo tendrás que decirme hola.
Atentamente, Lidia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario